jueves, 2 de abril de 2009

No las hemos de olvidar.

Hoy no voy a poder escribir mucho -se que nunca lo hago- pero hoy voy a poner alguna que otra foto en homenaje a estos héroes que fueron a morir por nuestras tierras en el sur. Si quieren cosas de Malvinas miren las entradas más antiguas.



MARCHA DE MALVINAS

¡Tras su manto de neblinas,
no las hemos de olvidar!
"¡Las Malvinas, argentinas!"
clama el viento y ruge el mar,

Ni de aquellos horizontes
Nuestra enseña han de arrancar,
pués su blanco está en los montes
Y en su azul se tiñe el mar.

Por ausente, por vencido
bajo extraño pabellón,
ningún suelo más querido
de la Patria en la extensión.

¿Quién nos habla aquí de olvido,
de renuncia, de perdón?
¡Ningún suelo más querido
de la Patria en la extensión!

¡Rompa el manto de neblinas,
como un sol, nuestro ideal;
"Las Malvinas, argentinas
en dominio ya inmortal"!

Y ante el sol de nuestro emblema.
Pura, nítida y triunfal,
brille, ¡oh Patria!, en tu diadema
la perdida perla austral.

coro ¡Para honor de nuestro emblema,
para orgullo nacional,
brille, ¡oh patria!, en tu diadema
la perdida perla austral!




Las fotos:

Río Gallegos

Carhue

Iguazú

Resistencia

Las Toninas

Córdoba

San Nicolás

Chascomús

Morón

Posadas

Olviva

Comodoro Rivadavia

Río Grande

Puerto Madryn (hay más en el cuadro, de lo que puedes ver)

Villa Carlos Paz

Rosario


Cenotafio

Luján

Necochea

Usuahia


Eso es todo, en éste...uno de los días -sino el más- tristes del año.

domingo, 29 de marzo de 2009

Erich Hartmann.

Es el "As" con mayor número de victorias de entre todos los bandos. "Bubi" (bebe) era un diestro piloto y táctico, así como un excelente tirador en el aire. Se unió al JG52 en Rusia, cuando todavía era casi un mozalbete, y logró más de 30 derribos en sus 8 primeros meses en combate. En apenas 10 meses esta cifra se disparó hasta 95. Para marzo de 1944 llevaba 200 y 250 en julio.
Al menos tres veces se fue a tierra por impacto de restos de los aviones de sus víctimas. Una vez en el transcurso de un combate chocó contra un Yak-9, pero consiguió volver a las base. En dos ocasiones se vio forzado a saltar en paracaídas, y en total realizó 14 aterrizajes forzosos.
Cuando los ataques americanos contra los campos de petróleo de Ploesti comenzaron a ser regulares, Hartmann y sus hombres se vieron obligados a realizar tres vuelos diarios, por la mañana y tarde contra los rusos y una misión de mediodía a Ploesti. Su unidad perdió a la mitad de sus hombres durante esta época. Los pilotos germanos no eran sustituidos tras un cierto número de misiones, el cansancio y la superioridad numérica enemiga comenzaron a pasarles factura incluso aunque volaban contra pilotos con menos experiencia.
Con una cifra de 292 derribos en agosto de 1944, quería desesperadamente llegar a los 300. El día 24 hizo su mejor resultado en un solo día de toda su carrera. Derribó seis por la mañana y cinco por la tarde, 11 derribos que le pusieron cómodamente por encima, con 303 en total. Siguió acumulando derribos hasta alcanzar la asombrosa cifra de 352, de los cuales 344 eran rusos y ocho P-51 Mustang americanos, con los que se enfrentó sobre Ploesti. Tras la guerra, los rusos lo apresaron y lo retuvieron preso durante 10 años como criminal de guerra.
Hatmann realizó 1425 misiones y mantuvo mas de 800 combates. Probablemente será recordado como el mejor as de todos los tiempos.




martes, 10 de marzo de 2009

Erich von Manstein

Su nombre completo era Erich Von Manstein/von Lewinski, nació en Noviembre 24 de 1887 en Berlín, su padre era un aristócrata prusiano y general de artillería y murió en Junio 10 de 1973. Su apellido Manstein le venía de su tío General Georg von Manstein. Empezó su carrera militar en el 3° Regimiento de Guardia a Pie. En 1913 entró en la Academia Militar y en 1914 recibió su promoción a Teniente. Participó en la I Guerra Mundial en el frente del Este y tras ser herido fue transferido al Staff del comandante de un Grupo de Ejercito. Promovido al rango de Capitán en 1915 pasó el resto de la I Guerra Mundial sirviendo como oficial de mando. Participó en la creación de el nuevo ejercito aleman la Reichswehr en 1922. En 1927 alcanza el rango de Mayor; el 1932 despues de visitar varias fuerzas militares de diversos paises es ascendido a Teniente Coronel y recibe el mando de un Batallon de Cazadores.
Mariscal de Campo Erich von Manstein
En 1936 es Mayor General y nombrado Jefe del Staff del General Bock, participando en el desarrollo de los tanques y los cañones de asalto., cuando se produce la purga en los altos mandos del Ejercito Alemán en Febrero de 1938 es enviado al mando de una division de infanteria en la provincia con el rango de Teniente General. Toma parte en la anexion de los Sudetes a Alemania. En 1939 es promovido a Teniente General y sirve como Jefe de Estado Mayor del General von Rundstedt estando por ello presente durante la Campaña en Polonia. En Febrero de 1940 recibe el mando del 38° Cuerpo de Infanteria para la invasión de Francia, donde perfecciona la tecnica de la Guerra Relámpago (Blitzkrieg). Propone su propia idea sobre el Plan de Invasión concentrando la mayoria de las Divisiones Panzer para ejecutar un solo y mortal golpe a traves de el bosque de las Ardenas, considerado por todos los militares de su época como no apto para una operacion mecanizada.

Durante la campaña de Francia es promovido a General y recibe la Cruz de Caballero. En 1941 recibe el mando de 56° Cuerpo Panzer asignado al Grupo Panzer de Hoepner como parte del Grupo de Ejército Norte en la Operación Barbarroja. En 4 días recorrre 340 km y llega a las puertas de la ciudad de Leningrado. En Septiembre de 1941 recibe el mando del 11° Ejército y captura en la Crimea a 430.000 soldados rusos. En Julio de 1942 captura la ciudad de Sebastopol y recibe su grado de Mariscal. Cuando el Sexto Ejército de Paulus y parte del 4° Ejercito Panzer son atrapados en Stalingrado, recibe el mando de la operación a fin de liberarlos, a pesar de que llega muy cerca, los contraataques rusos lo obligan a retirarse 200 Km.

En Febrero de 1943 recibe el comando del Grupo de Ejércitos Sur (unión del Grupo de Ejército del Don y el Grupo de Ejércitos A) recaptura la ciudad de Jarkov en Marzo 15 de 1943, seguida de Belgorod; ejecutando una de las mas brillantes ofensivas de la guerra. Participa en la Operación Zitadelle, donde se suscita la mas grande batalla de tanques en la historia, en el área de Prochorovka, en ella se encuentran el II Cuerpo Panzer SS del General Paul Hausser y el 5° Ejército de Tanques de la Guardia del Teniente General Pavel Rotmistrov; la cual termina en una larga retirada de la Wehrmacht. A mediados de 1944 von Manstein desobedeciendo una orden de Hitler ordena a los Cuerpos de Ejercito 11° y 42° retirarse de la bolsa de Cherkassy .
Manstein en conferencia con HitlerEn Marzo de 1944 es relevado del mando y recibe las Hojas de Roble para su Cruz de Caballero.

En Mayo de 1945 es arrestado por los Británicos, en el otoño de 1946 es transferido al campo especial para prisioneros de alto rango en la Gran Bretaña y transferido de nuevo a Alemania en 1948, durante los juicios por los crimenes de guerra es sentenciado a 18 años de prision, es necesario recordar que la defensa del mismo es pagada por un grupo de oficiales britanicos que no estuvieron de acuerdo con la sentencia; es liberado en 1952 por su delicado estado de salud. En 1956 se convierte en consejero de la Bundeswehr, siendo el unico de los Mariscales de Campo de Hitler llamado a colaborar en la creacion del nuevo Ejercito Alemán. Muere a la edad de 85 años en Julio de 1973, siendo enterrado con todos los honores militares en el cementerio de Dorrmark.

Es considerado como uno de los generales mas brillantes de la Segunda Guerra Mundial y un estratega de la guerra de movimiento. El Mariscal Malinovski (ruso) escribió alguna vez de Manstein "Nosotros recordamos a Manstein como uno de nuestros mas peligrosos oponentes. Su incomparable maestría en la solución de cualquier situación no tenia igual".

miércoles, 18 de febrero de 2009

Otto Skorzeny.

El Obersturmbannführer Otto Skorzeny (Viena, 12 de junio de 1908 - Madrid, 5 de julio de 1975), ingeniero austríaco que fue especialista en operaciones especiales perteneciente a las Waffen-SS de la Alemania nacionalsocialista durante la Segunda Guerra Mundial.



Gran experto en acciones de espionaje y sabotaje, fue apodado por los americanos como Cara Cortada debido a las grandes cicatrices que surcaban sus mejillas. Se hizo famoso al rescatar al dictador italiano Benito Mussolini, así como llevar a cabo la Operación Greif que le valió el título de El hombre más peligroso de Europa por los aliados. Se cree que fue uno de los principales organizadores de ODESSA en España.
Fue junto con Reinhard Heydrich uno de los hombres más capaces e inteligentes, si no el más hábil, con que contaba Adolf Hitler en temas de misiones de comandos, además de ser respetado y temido entre sus pares.


Juventud e inicios en las SS


Skorzeny nació en el seno de una familia vienesa de clase media de origen alemán y posiblemente polaco. Al finalizar la Primera Guerra Mundial, su familia sufrió las consecuencias del Tratado de Versalles y sobrevivió gracias a la ayuda de la Cruz Roja. Sin embargo, las penurias pasadas no impidieron que creciera hasta medir 1,90 m de estatura.
A los 18 años se inscribió en la Universidad de Viena para estudiar ingeniería. De carácter deportista y aventurero y amante de los desafíos, a menudo estaba en medio de reyertas, y allí se unió a una de las muchas Schlagende Verbindungen o sociedades de duelo que existían en Austria y Alemania. Libró catorce duelos en total, y en el décimo, en 1928, recibió la Schmisse o cicatriz de honor que llevó con orgullo toda su vida.
A pesar de simpatizar abiertamente con el NSDAP se mantuvo a la expectativa y no se hizo miembro del partido. En 1938, durante el Anschluss intervino por petición de un amigo suyo, Bruno Weiss, miembro del nuevo gobierno nacionalsocialista, para proteger al depuesto presidente Wilhelm Miklas en un encuentro entre la policía y la guardia de Miklas, debido al desconcierto del momento. En 1939, Skorzeny trabajaba como ingeniero cuando estalló la Segunda Guerra Mundial. Inmediatamente se ofreció como piloto a la Luftwaffe, ya que tenía experiencia con avionetas, pero fue asignado a operaciones de tierra porque tenía más de 30 años. No dejándose desanimar, es propuesto para servir en las Waffen-SS, específicamente en la selecta división SS Leibstandarte, conocida popularmente como la guardia personal de Hitler. En esta división destacó y luego fue enviado a la 2.ª división de las SS Das Reich. Entre 1940 y 1941, participó en las campañas en Francia, Holanda y los Balcanes. En la campaña en Rusia de 1941, donde le otorgan la Cruz de Hierro, cae enfermo y es enviado de vuelta a Viena en diciembre.
Al regresar a Alemania es ascendido a capitán de la Reserva y destinado a los Servicios de Inteligencia. Tras este destino es nombrado jefe de comandos y se le encarga la tarea de entrenar tropas especiales para labores de guerra de guerrillas, sabotajes, secuestros, etc.
Después de pasar un tiempo organizando los comandos, se encontraba en Berlín el 25 de julio de 1943 almorzando con un amigo de juventud cuando se le comunicó que Hitler en persona quería hablar con él. Hitler consideraba a Otto Skorzeny un hombre muy efectivo y de confianza para el logro de complicados objetivos. La confianza no estaba mal depositada.


Rescate de Mussolini

Skorzeny se dirigió rápidamente al Cuartel General del Este, la Wolfsschanze (Guarida del lobo), donde Hitler lo seleccionó de entre seis jefes de las SS para que llevara a cabo el rescate de Il Duce Benito Mussolini, que acababa de ser traicionado por su partido y arrestado, siendo desconocido su paradero. Se le puso bajo las órdenes del jefe de paracaidistas alemanes General Kurt Student.
Desde entonces estuvo buscando a Mussolini. El gobierno de Badoglio supo de la operación y trató de evitar que le localizaran. Skorzeny estuvo entonces exponiéndose en territorio enemigo, llegando a ser atacado por unos cazas británicos que derribaron su Heinkel He 111, por lo que se rompió tres costillas. Como no quería perder la misión, y siguió buscando al dictador italiano, hasta que descubrió que estaba en el Hotel Campo Imperatore en el pico más alto de los Apeninos, el Gran Sasso. En efecto Mussolini estaba como prisionero en ese hotel y los carabinieri que lo custodiaban tenían órdenes de ejecutarlo ante el primer intento de rescate o fuga.
Skorzeny pudo percatarse de que la operación era arriesgadísima, dada la topografía del terreno que solo daba como solución el aterrizaje sobre una pequeña explanada al borde de un alcantilado contiguo al hotel. Justo antes del aterrizaje se dio cuenta de que la explanada, que había fotografiado para estudiar el terreno, no era tan plana como pensaba, sino que en realidad estaba bastante empinada, haciendo que el aterrizaje sobre ésta fuera realmente peligroso. La operación requería el uso de planeadores y combatientes profesionales experimentados, por lo que se escogieron comandos paracaidistas para la misión. Las probabilidades de éxito eran apenas un 20%.
El 12 de septiembre de 1943, a las 12:30 del mediodía, Skorzeny junto con nueve aeroplanos despegó hacia el Gran Sasso para rescatar a Mussolini. La operación llamada Unternehmen Eiche (misión roble) fue llevada a cabo con éxito y se rescató a Mussolini sin un sólo disparo, pues los carabinieri se rindieron en el acto.
Mussolini fue embarcado en una avioneta Storch, donde también se acomodó el mismo Skorzeny como guardaespaldas de Mussolini. El piloto de la Storch protestó, pues el avión era biplaza y Skorzeny y Mussolini sobrepasaban con creces la capacidad de la avioneta de reconocimiento. Skorzeny insistió y el aeroplano a duras penas remontó el aire.
Skorzeny y Mussolini viajaron a Viena en un Heinkel He 111 que estaba allí especialmente preparado, donde fue recibido por Hitler. Luego Skorzeny fue felicitado por el mismo Hitler, se le entregó la Cruz de Caballero y además se le ascendió a Sturmbannführer de las Waffen SS.
Algunos historiadores aseguran que Skorzeny fue sólo un observador en el rescate, pero como él llevó a Mussolini a Viena y sólo él apareció en las cámaras, fue mostrado a los medios alemanes como el organizador de la operación. Se dice que, en realidad, la operación fue liderada por el teniente Otto Graf von Berlepsch y estudiada por el Mayor Harald Mors, que estuvieron presentes en el rescate. Sin embargo, el liderazgo estaba a cargo del coronel Kurt Student. Sea como fuere, Skorzeny demostró que la elección de Hitler no estuvo equivocada. Posteriores hechos demostrarían el valor de Skorzeny.


Operaciones en Yugoslavia y Hungría

Después de haber sido mimado por los altos jefes de la Wehrmacht, Skorzeny volvió a la acción. El 25 de mayo de 1944 se le encomendó la orden de capturar vivo o muerto al jefe de los partisanos yugoslavos, Tito, que estaban causando graves problemas en los Balcanes. Ese mes y el siguiente ejecutó la Operación Rösselsprung, donde envió comandos de paracaidistas al cuartel general de Tito. Los alemanes, en desventaja numérica, lograron derrotar a los partisanos, pero durante el ataque Tito escapó y vivió para convertirse en presidente de su país en la post-guerra.
Durante el atentado contra Hitler del 20 de julio, Skorzeny se hizo cargo de la situación en Berlín cuando Stauffenberg ya había sido fusilado.
El 10 de septiembre de ese mismo año, Hitler lo llamó de nuevo a la "Guarida del Lobo" para comunicarle una misión secreta. Allí Hitler le contó de algunos contactos que el regente de Hungría, el almirante Miklós Horthy, estaba teniendo con el Ejército Rojo para rendirles el país. Si esto se llevaba a cabo, casi un millón y medio de rusos se abalanzarían sobre un millón de alemanes y se abriría un amplio corredor hacia Alemania y Austria. Se le ordenó que en caso de que se intentara rendir a Hungría, Skorzeny debía tomar el Burgberg, la colina donde residía Horthy.
Después de indagar en Budapest, Skorzeny descubrió que el hijo de Horthy, Miki, estaba negociando la rendición con partisanos de Tito, por lo que el 15 de octubre se dirigió al hotel donde estaban negociando la rendición y arrestó a los partisanos junto con el joven Horthy. A las pocas horas, Horthy padre anunció en la radio que Hungría se rendiría a los rusos, por lo que Skorzeny acudió al Burgberg a arrestar también al viejo Horthy. Sin embargo, al temer por la vida de su hijo, Horthy decidió finalmente no rendir a Hungría. Para entonces Skorzeny ya había partido a asaltar el Burgberg y nadie se molestó en avisarle que la operación se había cancelado.
La Operación Panzerfaust se llevó a cabo esa misma noche. Skorzeny y sus tropas sitiaron la colina y se pusieron a patrullar alrededor. Los húngaros creyeron que los alemanes iban a sitiar el lugar y se confiaron. No obstante, Skorzeny subió inesperadamente con sus vehículos armados la colina y después de enfrentarse con los defensores, la tomó, con 4 muertos alemanes. El almirante Horthy fue llevado como 'invitado' a Alemania, donde abdicó pocos días después. El germanófilo conde Ferenc Szálasi lo reemplazó como regente.
Skorzeny se quedó en el Burgberg, disfrutando de la simpatía de Hitler. Sin embargo, no pudo descansar mucho, ya que el 21 de octubre, éste lo llamó al cuartel general para anunciarle que iba a empezar la Batalla del Bulge y necesitaba su ayuda para una operación especial.


Operación Greif

El 22 de octubre Hitler le habló a Skorzeny de una ofensiva que llevaría a cabo en las Ardenas, una zona boscosa que comprende Bélgica y Luxemburgo, cuyo objetivo final era la conquista del puerto de Amberes, lo cual retrasaría notablemente la ofensiva en el oeste, dando tiempo a los alemanes a estabilizar el Frente Oriental, así como intentar lograr la paz con las potencias de habla inglesa.
Luego Hitler le contó a Skorzeny acerca de una idea que había tenido al enterarse de que algunos norteamericanos se habían disfrazado de alemanes cerca de Aquisgrán. El Führer había decidido que Skorzeny y sus unidades pasarían las líneas enemigas disfrazados de militares británicos y norteamericanos, y sembrarían la confusión entre las tropas aliadas, justo horas antes de iniciarse la ofensiva en las Ardenas. Esta operación secreta recibió el nombre de "Operación Greif".
La unidad de Skorzeny poseía 80 soldados que hablaban inglés con soltura, así como 14 jeeps americanos y 60 carros armados camuflados como tanques Sherman. Skorzeny disponía también de unos 3.500 hombres que pasarían detrás de los soldados camuflados. Después de internar a sus soldados por varias semanas en campos aislados del exterior para enseñarles costumbres americanas, Skorzeny se sintió listo para llevar a cabo la misión.
A primeras horas del 16 de diciembre de 1944, dos mil cañones alemanes dispararon en el frente de las Ardenas y dio comienzo la ofensiva. Las tropas alemanas se abalanzaron sobre los sorprendidos norteamericanos, pero a pesar de cumplir sus objetivos iniciales, las bajas fueron elevadas y el avance inicial se detuvo.
Mientras tanto varios jeeps 'norteamericanos' penetraron las filas aliadas. Después de sembrar la confusión en el enemigo, lograron incluso desviar importantes unidades desde su destino, y por un momento la confusión fue total. Pronto los aliados se percataron de que las rutas de sus unidades habían sido alteradas por "oficiales" que estaban en las convergencias de los caminos en jeeps americanos y que sin duda eran infiltrados alemanes, y se tomaron las medidas apropiadas al caso.
Los alemanes disfrazados fueron siendo descubiertos y arrestados uno tras otro. Debido a que utilizaban el uniforme enemigo, se les acusó de espionaje y fueron fusilados inmediatamente. No menos de 200 alemanes fueron fusilados. No obstante, antes de ser ejecutados habían declarado, basándose en rumores, que el objetivo de la Operación Greif era asaltar el Cuartel General de Eisenhower y asesinarlo. Esto produjo pánico entre los aliados y desató una ola de medidas paranoicas que dificultaron las operaciones militares, tales como el encierro de Eisenhower en el cuartel general por dos semanas. En este período los norteamericanos le asignaron a Skorzeny el título de el hombre más peligroso de Europa, que sin duda lo era.
Mientras tanto, Skorzeny se había dado cuenta de que la misión estaba condenada al fracaso, pero decidió no cancelarla por la insistencia de Hitler. Un día, mientras se desplazaba por el frente, fue alcanzado por metralla que le hirió gravemente en la cabeza y se le envió a Berlín.


Últimos días de la guerra


El 30 de enero de 1945 Skorzeny fue enviado por Himmler al frente del río Oder para detener a los rusos. Con una fuerza de 5.000 hombres, de los 20.000 prometidos por Himmler, Skorzeny salió hacia Schwedt a luchar en una guerra perdida. Después de reclutar hombres entre antiguos pilotos, heridos, ingenieros, ancianos y adolescentes, aumentó sus fuerzas a casi 15.000, la mayoría sin mucha experiencia.
El 7 de marzo Skorzeny recibió la orden de ir a Berlín para encomendarle otra misión. Allí se le comunicó que el primer puente sobre el río Rin había sido tomado por los aliados cerca de Remagen. Hitler estaba furioso y se le ordenó a Skorzeny que organizara un comando de hombres rana para volar el Puente de Ludendorff. Skorzeny protestó, alegando que las probabilidades de éxito eran mínimas, pero aun así se le encomendó la misión. La operación fue un fracaso y los hombres que no fueron apresados murieron congelados en las heladas aguas del Rin.
Poco después Skorzeny tuvo que trasladarse de nuevo a Berlín. El Hitler que lo recibió estaba acabado y completamente aislado de la realidad, y después de imponerle la Cruz de Caballero con Hojas de Roble se despidió. Esta fue la última vez que Skorzeny vio a Hitler.
Cuando su ciudad natal estaba a punto de caer en manos de los rusos, Skorzeny partió a Viena para conocer el destino de su familia. En el camino encontró oleadas de soldados huyendo, abandonando a los heridos en el camino. En Viena se entrevistó con el antiguo líder de las Juventudes Hitlerianas Baldur von Schirach, que igual que Hitler, vivía completamente aislado de la realidad. Schirach le aseguró que combatiría hasta la muerte en Viena, pero a los pocos días se rindió a los rusos.
El 11 de abril Skorzeny abandonó Viena, y al contemplar una vez más a su ciudad natal en llamas, decidió que ya no iba a luchar más. No obstante, obedeciendo órdenes de Berlín, se dirigió al llamado Reducto Alpino, entre Austria y Alemania, donde debería organizar la defensa del último baluarte nazi. Desilusionado, Skorzeny descubrió que el Reducto Alpino nunca había sido construido, por lo que el 8 de mayo de 1945 Otto Skorzeny se entregó al ejército estadounidense.


Después de la guerra


Skorzeny pasó los dos años siguientes en un campo de prisioneros de guerra. Sus contrapares ingleses y americanos lo trataron bien, pues le consideraban una leyenda. Luego se le juzgó en Núremberg. Se le acusó de la matanza de varios soldados aliados durante la Batalla de las Ardenas (la matanza de Malmedy), pero fue declarado inocente. Después se le acusó de intentar matar a Eisenhower, pero esta nueva acusación carecía de fundamentos. Al final fue acusado de ordenar a sus hombres que utilizaran el uniforme enemigo durante la Operación Greif. Esto constituía un crimen de guerra y Skorzeny no pudo negarlo. Sin embargo, la acusación se vino abajo cuando el famoso jefe de escuadra inglés Yeo-Thomas vino en su ayuda y testificó que los ingleses también habían usado el uniforme enemigo durante la guerra.
Aunque Skorzeny fue declarado inocente de todos los cargos, se le internó en un campo de desnazificación hasta que escapó, gracias a la ayuda de un comando de élite de las SAS británicas, a España el 27 de julio de 1948. No se le persiguió. Skorzeny se estableció en Madrid y siguió trabajando de ingeniero. Su estancia en Madrid se vio manchada por la sospecha de que ayudó a criminales nazis a escapar a Málaga y Alicante a través de la organización ODESSA, creada por antiguos miembros de la SS. También residió en Bolivia y Argentina organizando fuerzas de seguridad, tuvo contactos con otros nazis, como el aviador Hans-Ulrich Rudel, Adolf Eichmann y Josef Mengele entre otros.
Publicó sus memorias en dos tomos titulados Vive peligrosamente y Luchamos y perdimos. Editorial Acervo. 1972. Barcelona. En Argentina se llamó "Misiones Secretas", publicado por ediciones Cenit en 1954.
Durante sus últimos años Otto Skorzeny vivió en Alcudia (Mallorca) y murió de cáncer en Madrid el 7 de julio de 1975 a los 67 años. Fue incinerado y sus restos inhumados en Austria.


miércoles, 11 de febrero de 2009

Erwin Rommel

Mariscal de Campo Erwin Rommel - El Zorro del Desierto

Nació el 15 de Noviembre de 1881 en Heidenheim and der Brentz cerca de Ulm en el estado de Wurtemberg. Se unió al ejercito en 1910 y en Marzo de 1911 ingresó a la escuela militar de oficiales de Danzing (Gdansk). Contrae matrimonio en 1916 con Maria Mollin y la pareja tiene un solo hijo en 1928, llamado Manfred. Participó en la I Guerra Mundial, recibiendo la Cruz de Hierro de Primera Clase en Enero de 1915 en Argonne. En Mayo de 1917 fue transferido al frente del Oeste y participo en los asaltos de Mone Cosna y Caporeto donde obtuvo la Orden al Merito, siendo ascendido a Capitán. En 1919 es trasladado a Friedrichshafen para comandar una compañía de seguridad interior, lo encontramos en 1929 cuando se desempeña como instructor de infanteria en una escuela en Dresden; publica su libro "Ataques de Infanteria", basado en sus experiencias de la I Guerra Mundial. Para la epoca de la II Guerra Mundial es promovido a Mayor General y nombrado comandante del Cuerpo de Guardia de Adolf Hitler durante la campaña de Polonia. Despues de la campaña de Polonia le es asignada la Séptima División Panzer, haciendo parte del XV Cuerpo Panzer comandado por el General Hoth durante la Invasión de Francia. En Mayo 10 de 1940 los alemanes invaden Francia y Rommel a la cabeza de su Séptima División alcanza Dinant para Mayo 13, no encontrando oposición alcanza Philipville en Mayo 15 y para mayo 21 se encuentra en Arras,donde se produce el primer contrataque de los Aliados. Cuando los Alemanes lanzan su ataque al interior de Francia, Rommel avanza desde Abeville, alcanzando Rouen en Junio 10, Cherburgo el 19 de Junio, en Junio 25 termina la batalla por Francia, donde la Séptima División consigue su título como la División Fantasma, ya que ni el Alta Mando Aleman, ni el staff de Rommel sabía en donde estaba, su éxito consistía en la velocidad de penetración y siempre a la cabeza de sus tropas, existiendo ocasiones en las cuales apaga los sistemas de comunicacion para no ser "molestado". Despues de la campaña de Francia se dedica a escribir su diario donde describe los acontecimientos de Mayo y Junio de 1940; en Enero de 1941 es promovido al rango de Teniente General y trasladado a Berlin, donde recibe el Mando del Africakorps, con el fin de apoyar a Italia en su campaña contra los ingleses. En Febrero 14 de 1941 Rommel llega a Tripoli con la 5ta División Ligera Panzer, encontrándose la primera vez con los ingleses el El Aghelia, para Marzo 31 lanza un victorioso ataque sobre las posiciones britanicas de Mersa Brega, utilizando las tacticas de la Blitzkrieg perfeccionadas en Francia, empuja a los británicos avanzando desde Tripolitania sobre Lybia, Cyrenaica, capturando Bengazi. Para Abril 15 de 1941 se encuentra en Bardia y Solum, alcanza la frontera oeste de Egipto y los ingleses se ven obligados a atrincherarse en Tobruk. Para esta época se lo empieza a conocer como El Zorro del Desierto, por su constante improvisación y obtención de recursos donde otros no los encuentran. Es ascendido a Mariscal de Campo, siendo el más joven Mariscal Alemán de todos los tiempos a los 50 años. En Agosto de 1941 el Africakorps es reorganizado y conformado como el Grupo Panzer África, Rommel es colocado al mando de todas las fuerzas en África. En la noche del 17 de Noviembre de 1941 un comando inglés penetra en el campamento del Cuartel General de Rommel con el propósito de asesinarlo, pero él no se encuentra allí. En Noviembre 18 de 1941, los ingleses comienzan su ofensiva denominada Crusader, en la cual Rommel es obligado a retirarse hasta El Aghelia en Lybia. En Enero de 1942 Rommel inicia su ofensiva, obliga a los ingleses a retirarse hasta la linea de Gazala y recibe su Cruz de Caballero con Hojas de Roble, Espadas y Diamantes; para Mayo 26 de 1942 reinicia su ofensiva, capturando Tobruk en Junio 26; continúa empujando a los ingleses dentro de Egipto y alcanza El Alamein, ubicado a 96 Km al oeste de Alejandría, completamente agotadas sus Divisiones Panzer y corto de equipo y abastecimientos, se ve obligado a detenerse. A pesar de sus contínuas peticiones a Berlín de suministros y recomposición de sus fuerzas no es oido,cae enfermo y debe viajar a Alemania. En Octubre de 1942 los ingleses vuelven contraatacar, destruyen las fuerzas alemanas y los Anglo-Americanos inician la operacion Torch, al continuar la ofensiva en dos frentes, Rommel se ve obligado a replegarse y para Febrero de 1943 lanza su última ofensiva en el Norte de Africa; en Febrero 23 de 1943 entrega el mando del Grupo África al General von Armin y vuela a Berlin con el fin de persuadir a Hitler de la desesperada situación del Africakorps, pero no es escuchado. En Mayo de 1943 se entregan a las fuerzas Aliadas y caen prisioneros 200.000 hombres. Rommel se encuentra emfermo y desilusionado. En las postrimerias de 1943 recibe el mando del Grupo de Ejercitos B bajo el Mariscal de Campo von Rundstedt, el cual es responsable por la zona desde Holanda hasta Burdeos y encargado como Inspector General para la construcción de la Muralla del Atlantico , con el fin de impedir el desembarco aliado en Europa. Una vez se efectúa el desembarco hace todo lo posible por impedir la penetración de las fuerzas aliadas; es herido en un ataque aereo y es gravemente implicado en el atentado efectuado contra Hitler el 20 de Julio de 1943 en el Cubil del Lobo, cuartel general de Hitler en el Este. Transferido a un hospital, se le da la alternativa de ser enjuiciado como traidor o suicidarse, determinacion que ejecuta por su propia mano el 14 de Octubre de 1943. Se le entierra por orden de Hitler con todos los honores militares de su rango y se ordena un día de luto nacional. Rommel fue considerado por todos sus amigos y enemigos como el ultimo de los caballeros y no fue nunca implicado en los crimenes de guerra de la Segunda Guerra Mundial.





Perdón si tiene algún error ortográfico, lo corregí yo, era un desastre el texto.

domingo, 1 de febrero de 2009

Cementerio Darwin.

EL CEMENTERIO ARGENTINO DE DARWIN, ABANDONADO

Nadie cuida a los muertos en Malvinas




Jorge Lanata viajó a las Malvinas para contar, desde el próximo domingo, qué pasa en las islas hoy, cómo viven los argentinos radicados en Puerto Argentino y qué piensan los kelpers del conflicto que estalló hace 25 años. Además, prepara un especial que se editará en DVD y saldrá a la venta con la edición de PERFIL del 1 de abril. Pero apenas comenzó su investigación el periodista llegó al cementerio de Darwin donde están enterrados los soldados argentinos caídos en la guerra y se encontró con un panorama desolador: tumbas abandonadas, cruces en malas condiciones y el Estado argentino ausente.


Por Jorge Lanata


Desde el sábado a la tarde que me pregunto donde está Puerto Argentino. ¿Donde está Puerto Argentino? Escribo estas líneas en Stanley, la capital de una colonia británica en la que hay que pagar doscientas libras de multa por tirar una lata a la calle, una ciudad en la que nada hace ruido y donde conviven, hace veinticinco años, dos mil soldados con dos mil quinientos habitantes: lo que cualquiera llamaría un lugar seguro. Aqui no está Puerto Argentino; esta es la réplica exacta de Truman Show, habitada por británicos que sobreactúan su anglicanismo y por kelpers –no debo llamarlos asi, lo odian, se dicen a sí mismos “islanders”– que aclaran apenas se los conoce sus generaciones en las islas:muchas de estas familias están aquí desde 1840.
“Welcome to the Falkland Islands” dice el letrero que se levanta en la entrada del muelle y las señoras gordas que bajan excitadas de los cruceros se tiran encima de dos islanders disfrazados de pingünos para sacarse una instantánea. Ellas no llegan a Puerto Argentino, y a veces –porque el crucero ya zarpa o porque simplemente se olvidaron– le sacan fotos al documental de pingüinos que se exhibe en una pantalla de plasma, a la entrada del Jetty Center: mejor llevar a casa un pingüino catódico que ningún pingüino.
Recién el miércoles encontré Puerto Argentino: está a casi dos horas de Stanley, mucho después de la base militar y en dirección a la Nada, por un camino de ripio resbaladizo, lleno de piedras filosas y grises, cruzando unos montes tímidos que apenas se elevan del piso. Nuestra camioneta es el único auto en toda la ruta y un helicóptero, después de más de una hora de camino, nos despertó de aquella sensación de fin del mundo. Después Nada otra vez. Piedras, ovejas torpes que asomaban en el camino y, de pronto, inmensos circulos de pasto y tierra quemada. Primero uno, luego decenas; irregulares, negros, a los costados del camino.
Bombardeos, dice alguien en el auto, como si hiciera falta aclararlo.
El camino se divide y una señal improvisada dice en letras blancas sobre una madera torcida: “Argentine Cemetery”. Comenzamos a bajar la loma hacia el cementerio; desde allí se alcanza a ver el poblado de Darwin: son sólo cinco o seis casas inglesas de dos plantas y una granja.
Fue entonces cuando vi, por primera vez, Puerto Argentino.
Known unto god (solo conocido por dios). En la página 3 del semanario Pengüin News (la unica fuente informativa de la islas)del 23 de febrero, perdida debajo de la noticia sobre un recital de caridad de las gemelas Goss y una aclaración de la compañía de teléfonos sobre los viejos códigos de acceso internacional, apareció un suelto sobre el cementerio argentino. “Fue cuestionada la decisión del gobierno de pagar el mantenimiento del cementerio argentino de Darwin –dice el artículo–. La Consejera Robertson afirmó que ha tratado en vano de comunicarse con la Comisión Argentina de Familiares,sin recibir ninguna respuesta. Ella afirmó que, siendo el corriente el año del aniversario, es escencial reparar y redecorar el cementerio, y (ante la ausencia de los argentinos), es el gobierno local quien debe asumir la responsabilidad”.
La del abandono, entonces, comenzaba a ser una historia argentina.
Según recuerda Federico Lorenz en su libro “Las guerras por Malvinas”, en noviembre de 1982 el gobierno británico presentó una nota a su par argentino explicando que en los recientes campos de batalla aun quedaban cuerpos insepultos que el verano austral estaba dejando al descubierto. La nota preguntaba qué quería hacer el Estado argentino con ellos. El gobierno militar recien respondió en enero siguiente autorizando el entierro de sus soldados caidos pero “reservándose el derecho de decidir, cuando sea adecuado, acerca del traslado de los restos de los soldados argentinos desde esa parte de su territorio al continente”. Los ingleses decidieron entonces designar una comisión para trasladar los cuerpos a Puerto Darwin.La prensa de entonces señaló la preocupación del general David Thorne por presionar al gobierno argentino para que se encargase del tema ya que de otro modo seria él quien, cumpliendo su deber como soldado, debería hacerlo. Finalmente, a fines de 1982, el gobierno argentino declaró oficialmente muertos a los desaparecidos en la guerra. “La mayoría de los argentinos –señala Lorenz– fueron sepultados sin identificar, bajo cruces que simplemente indican “Known unto God”. El grueso de los tripulantes fallecidos en el hundimiento del crucero General Belgrano, por otra parte, jamas fueron recuperados”.
No existe hoy, veinticinco años después, una cifra consolidada de muertos argentinos en Malvinas: en “La Trama Secreta”, el clásico del género escrito por Cardozo, Kirchbaum y Van der Kooy, se menciona a 750 muertos, la BBC informó sobre 655 y otras estimaciones hablan de 694. En marzo de 1991 los familiares de los caidos realizaron su primer viaje a las islas bajo el auspicio de la Cruz Roja. Llegaron al aeropuerto militar de Mount Pleasant en un Jumbo de Aerolineas que debió borrar la palabra “argentinas” de su fuselaje y visitaron en Darwin las 235 cruces blancas de madera de cedro talladas por un carpintero inglés. Los familiares eran 354, y las tumbas identificadas solo 125, el resto eran soldados “Sólo conocidos por Dios”.
El 14 de julio de 1999 se firmó una declaración, “bajo el paraguas de la soberanía”, en la que se estalece que se construirá un monumento en Darwin en memoria de los caidos en combate. Finalmente el cementerio se construyó en 2004, mediante una donación de Eduardo Eurnekian (que, según se dijo oficialmente, fue cercana al millón de dólares), quien le fue presentado a los familiares de los caidos por el entonces embajador inglés, Robin Cristopher. La Comisión de Familiares viajó entonces con el apoyo económico de la Cancilleria para fiscalizar la finalización de la obra.
“Desde que se construyó, nadie más se ocupó del cementerio argentino”, dijo a PERFIL el Consejero Legislativo de las islas, Mike Summers. Summers aseguró que “tampoco trajeron la Virgen de Luján que iban a poner, de modo que hay todavía un agujero esperando la Virgen que nunca apareció”. Uno de los paneles de marmol que encuadra el cementerio está, en efecto, vacío: hay quienes afirman que iba a ponerse allí una bandera argentina, lo que fue prohibido por los británicos. La alternativa de llevar allí a la Virgen de Luján también presenta su dificultad: el manto de la Virgen es celeste y blanco. Mientras el gobierno de las Falklands se apresta a financiar el mantenimiento, trascendió que contratarían a un empleado local de Goose Green (está a menos de dos kilómetros del lugar)o a Sebastián Socodo, un argentino residente en Stanley que se ofreció a hacer el trabajo. “Yo estuve ahí cuando se hicieron los pozos para las cruces nuevas –recordó Socodo ante PERFIL–, yo hice casi doscientos de esos pozos… Es una lástima que ahora esté tan arruinado. Al cementerio antes lo cuidaban los militares ingleses. Ellos iban y cortaban el pasto y lo mantenían limpio.No sé si financiados por el gobierno o no, pero si sé que los de la base militar eran los que se encargaban”. Sobre el cierre de esta edición llegó a este equipo un comunicado firmado por Eduardo Eurnekian brindando una versión curiosa de los hechos: según el titular de Aeropuertos 2000, “nos comprometimos con los familiares a hacer el mantenimiento del cementerio a nuestro cargo. Hace treinta días se firmó un contrato por cuatro años con una persona de las islas que va a hacerse cargo de dicho mantenimiento”. El comunicado es, por lo menos, inexacto: desde la inauguración del cementerio de Darwin donado por Eurnekian, esto es desde hace más de dos años, nadie se ha ocupado jamás de mantenerlo, lo que explica su actual estado de abandono. Por otra parte Sebastián Socodo, a quien entrevistamos, reconoció haber recibido una solicitud de presupuesto de los familiares, que contestó calculando el trabajo en 4 mil libras anuales, y hace tres semanas que no obtiene respuesta alguna, lo que explica que se haya presentado ahora como posible proveedor del gobierno británico de las islas para hacer las refacciones.
Fuentes de la Cancilleria consultadas en Buenos Aires alegaron desconocer que las autoridades de las islas se hubieran ocupado alguna vez del cementerio argentino. “No hay ninguna constancia de eso en la Cancilleria”, dijeron. “De hecho, eso no les corresponde, y es la primera vez que lo escuchamos”.
La información de la cancilleria sobre las islas parece escasa: los funcionarios se niegan a viajar porque, de permitir que les sellaran el pasaporte estarían reconociendo la situación de hecho, por lo mismo que desalientan los viajes de ciudadanos particulares. De modo que la situación, por asi decirlo es…diplomática: desconocen una situación de hecho en la que sin embargo influyen financiando los viajes de los familiares.Consultados los hombres de la diplomacia por quienes podrían financiar las obras ya que no es, según ellos, asunto del Estado, sugirieron la búsqueda de donaciones particulares.
¿Donde están enterrados los soldados britanicos? En Inglaterra, junto a sus familiares. A excepción de diez de ellos cuyos parientes decidieron enterrarlos en Stanley.
“Estuve en el cementerio anterior y en el nuevo”, relató a PERFIL el ex comandante de la Royal Marine, Gary Clement. “Personalmente, creo que el anterior era mucho mejor, es una vergüenza lo que han hecho. Yo fui muchas veces al anterior y recuerdo que las familias habian dejado rosarios, flores y fotos en todas las tumbas. Era un lugar especial. En cambio ahora no hay nada, te hace sentir como si estuvieran abandonados. Como soldado británico, no me gustaria estar enterrado ahí de esa manera. Es una vergüenza para la Argentina”.
En Darwin está Puerto Argentino: hay cruces despintadas, y bosta de oveja entre las tumbas, y un viento que nunca termina de soplar.

*Desde las Islas Malvinas

Investigacion: J L/Tamara Florín

(en Malvinas) Romina Manguel/

Luciana Geuna (en Buenos Aires)

viernes, 30 de enero de 2009

A 30 años del conflicto de Beagle.

En los diarios hubo una celebración y posterior circo de destapar una placa sobre los 30 años de la mediación Papal sobre el conflicto en el sur de ambos países. Citan al General San Martín y a Bernardo O Higgins, y se habla de reforzar una hermandad entre "países hermanos".
Ahora bien, ¿es ésto posible? ¿Se puede confiar en nuestro vecino del oeste?



Para comprender por qué se hizo tanto hincapié en el Canal mencionado, hay que primero analizar a quién se centra en el conflicto : Chile, país que con su forma denota cierta irracionalidad geográfica, en realidad tan irracional no es. La corona Inglesa ayudó a O Higgins a independizar ese territorio estrecho, incómodo e impreciso, sólo por una razón: Quitarle a la Argentina toda posibilidad de acceder al pacífico. Tengan en cuenta la riqueza aduanera de Panamá, y multiplíquenla por todo nuestro territorio que accedería a los dos mares. Seríamos inmensamente ricos, poderosos, y tendríamos el poder de decidir quién recibe mercancía y quien no.. Recuerden sino cómo le robaron Antofogasta a Bolivia y por qué entraron en guerra con Perú en los años 90.
Volviendo al tema del Canal, Chile y Argentina aceptaron someter el diferendo al arbitraje de del Reino Unido con la condición de que fuera un tribunal arbitral compuesto por cinco peritos internacionales, nombrados por Chile y Argentina, quienes plantearan una propuesta a la monarca, la que finalmente aprobaría o rechazaría dicha propuesta de arbitraje, sin modificarla. El 22 de julio de 1971 los gobernantes Salvador Allende y el General Lanusse firmaron el Compromiso de Arbitraje entre Chile y Argentina, solicitud de Laudo Arbitral. Decidiéndose:
  1. Las islas Picton, Nueva y Lennox así como los islotes adyacentes pertenecen a Chile.
  2. Al dar el Tratado Límites de 1881 a Argentina una costa en el Canal Beagle, automáticamente el derecho internacional le concedía derechos marítimos sobre el canal, descartando la teoría de la costa seca. Conforme a lo anterior el tribunal trazó el límite al interior del canal de tal manera que ambos tuviesen libre navegación a sus puertos en el canal. En particular, dentro del canal, el islote Snipe fue otorgado a Chile y la isla Gable y las islas Becasse fueron otorgadas a Argentina.
Argentina declaró nula la sentencia, según su declaración, por deformación de las tesis argentinas, por abuso de las prerrogativas de la corte, por contradicciones lógicas, por errores de interpretación, por errores geográficos e históricos y por parcialidad. También se le consideró ilegal dentro de la legislación argentina por haber sido solicitado por un gobierno de facto, por que la solicitud no había sido aprobada por el congreso y por haber sido elaborado por la reina Isabel II.
Una vez Pinochet y Videla en el poder, se profundizó la contienda ya con tintes militaristas. A tal punto que hubo fuego cruzado en las fronteras, mientras el Papa Juan Pablo II se disponía a entregar casi todo el territorio en disputa a los Chilenos.
Estos ataques intensificaron posiciones en cada congreso, logrando que en la guerra de Malvinas Chile apoyara a los Ingleses, y luego de la guerra, en un gobierno criollo con fuerzas Armadas debilitadas, Pinochet pretendía una guerra con apoyo de las potencias de siempre.
En el retorno de la democracia, el pueblo votó a favor del laudo papal, que pregonaba la entrega del canal a los Chilenos.

Beagle es una cuenta pendiente en nuestro papel de nacionalistas, y evitar el manoseo de los gobiernos de izquierda es nuestra prioridad.
Michele Bachelet no es distinta a Pinochet. Sigue sus políticas económicas liberales de manera intacta, reprime manifestaciones a favor de la educación, y sostiene un sistema Chilote que apela a la polaridad social de manera tajante. Y nuestra presidente se saca fotos con ella. Ignorando el pasado. Ignorando NUESTRO pasado. Como si las muertes de nuestros soldados valieran lo mismo que hoy la soberanía. Es decir, nada.


¡VOLVEREMOS! ¡VIVA LA PATRIA TODA!

jueves, 22 de enero de 2009

Ataque al "Invencible".

El 30 de Mayo de 1983, el Diario ABC de Madrid publicaba:

"No sé si el sacrificio de estos pilotos devolverá las Malvinas a su país. Pero sé otra cosa, tal vez más importante... que cuando, en adelante, se imaginen al argentino ya no pensarán en el gaucho típico, en el engominado cantante de tangos o en la presidente de revista. Pensarán en esos pilotos que han sabido morir por saber por qué vivían, privilegio hoy al alcance de muy pocos. Es lugar común decir que Argentina ha sido bendecida por todos los dones del cielo y de la tierra; pero sobre todo, ahora lo vemos, por sus hijos que se hicieron aviadores."

El 29 de mayo por la mañana, la 2da. Escuadrilla de Caza y Ataque de la Fuerza Aérea Argentina recibió la orden de alistar sus aviones para atacar un blanco ubicado a unas 80 millas al este de las Malvinas, en el radial 090°.
En la Base Aérea de San Julián, siendo las 10:30 horas, el jefe de la Escuadrilla de aviones Skyhawk A4C citó en su despacho a los jefes de escuadras para explicarles que se había planeado una muy difícil misión y que la misma se llevaría a cabo en conjunto con aviones Super Etendard de la Armada.
El objetivo, les dijo, era el portaaviones “Invencible” al que se había ubicado en la posición indicada. Cuando terminó de hablar, el oficial preguntó a sus hombres quien se ofrecía a ir pero un silencio profundo siguió a sus palabras. Al cabo de unos segundos se escuchó la voz del primer teniente Ernesto Rubén Ureta que quebrando el silencio dijo:
-Yo voy.
Casi al instante habló su compañero y amigo de muchos años, el primer teniente José Daniel Vázquez para decir:
-Yo también.
El jefe de aquellos hombres sintió una profunda emoción y una agradable sensación de orgullo al ver a sus hombres ofrecerse voluntariamente para una misión de la que se sabía, resultaría sumamente difícil regresar. Les explicó que Vázquez sería el jefe y que debían ser ellos los encargados de elegir a sus compañeros.
Ureta seleccionó al primer teniente Omar Jesús Castillo y a su compañero, el alférez Gerardo Guillermo Isaac. Un quinto piloto, el teniente Daniel Paredi, conduciría hasta Río Grande a un quinto aparato que haría las veces de reserva.Los cinco Skyhawks despegaron desde su base rumbo a Tierra del Fuego a las 12:45 y tras un vuelo sin inconvenientes, aterrizaron una hora después. Detrás de ellos, en un Learjet, viajaba el jefe de la Escuadrilla con los planes y cálculos de combustible que sus máquinas necesitarían para llevar a cabo la arriesgada incursión.

Se trataba de una misión sumamente compleja en la que los aviones deberían rodear el archipiélago a unas 200 millas por el sur, remontar luego hacia el norte y atacar a las naves enemigas ¡“desde el este”!. Para ese momento, volaban también hacia Río Grande los Super Etendard de la Marina, listos para unirse a sus hermanos de la Fuerza Aérea.
Al día siguiente, cuando todo estuvo listo, tuvo lugar la histórica misión. El primero en despegar, cerca del medio día, fue el capitán de la Armada Argentina Alejandro Francisco, seguido segundos después por su numeral, teniente Luís Antonio Collavino. Cinco minutos después partieron los A4C de Fuerza Aérea encabezados por su jefe, el primer teniente Vázquez a quien siguieron, en este orden, su segundo, el primer teniente Ureta y sus escoltas, el teniente Castillo y el alférez Isaac.
Ascendieron todos hasta los 12.000 pies y poniendo rumbo sudeste, con muy buen tiempo, se encontraron cincuenta minutos después, con los aviones cisternas KC-130.
Los ocho aparatos volaron juntos, a lo largo de 300 kilómetros, turnándose para efectuar la carga. Al alcanzar el punto convenido, los Hércules KC-130 se separaron y se alejaron lentamente hacia el continente mientras los cazas continuaban rumbo al este, adoptando formación de ataque.
Afortunadamente la lluvia era intensa y sirvió para que la sal no se cristalizara contra los vidrios y entorpeciese la visión. De todas maneras, hubo una pérdida de contacto visual que produjo un leve desvío de ruta. Sin embargo, el excelente sistema de navegación de los Super Etendard permitió a la formación corregir el rumbo y seguir adelante sin inconvenientes.
Volando rasantes sobre un mar embravecido y con absoluto silencio de radio para no advertir al enemigo, los cazas argentinos se aproximaron a las islas, comunicándose a través de señas. Todos rezaban para que nada fallase; se sabía que si el avión que transportaba el Exocet tenía problemas, la misión debería abortar.
La formación atravesaba el último pasaje previo al ataque cuando los Super Etendard ascendieron unos metros para emitir con el radar. Deberían hacerlo rápido para evitar su detección.

Un número considerable de ecos dispersos iluminó las pantallas de a bordo, demostrando una actividad naval enemiga poco convencional. Francisco y Collavino descendieron inmediatamente, seguros que se trataba de señales verdaderas y al ascender por segunda vez para detectar el blanco, el primero rompió el silencio para comunicar que había enganchado el blanco:
— ¡20 millas al frente en proa!. Disparo misil!
Los seis pilotos experimentaron una gran tensión pues sabían que un duro combate estaba por empezar. Francisco oprimió el obturador y lanzó el misil. Sus compañeros vieron al Exocet caer hacia las aguas y cuando parecía que iba a colisionar con ellas, observaron como encendía su motor y comenzaba a volar estabilizadamente al ras de la superficie. Los Super Etendard viraron hacia la izquierda y se alejaron. Era el turno de la Fuerza Aérea.
Volando a 30 metros del agua, los pilotos se concentraron sobre el objetivo, listos para abrir fuego con sus cañones.
De manera repentina el teniente Ureta vio estallar a su lado al avión del primer teniente Vázquez. El aparato, alcanzado por un Sea Wolf, dio una vuelta hacia adelante y estalló sin dar tiempo a su piloto a eyectarse. El alférez Isaac, que volaba muy cerca, sintió una impresionante sacudida, producto del estallido.Ureta, seguido por sus compañeros, siguió avanzando firmemente mientras los ingleses les disparaban con todo lo que podían. A bordo de sus naves sonaban las alarmas y la tripulación se arrojaba en busca de protección.
Poco después se deshizo en el aire el teniente Castillo.
Con un nudo en la garganta por la muerte de sus compañeros, pero sin dejarse amedrentar, los aviadores restantes continuaron volando hacia el objetivo a toda velocidad. Antes de disparar sus cañones, Ureta alcanzó a distinguir la inconfundible silueta del “Invincible”, con su pista de aterrizaje, la isla y las dos bochas blancas de los radomes de proa y popa.
Cuando tuvo al buque en la mira, Ureta disparó sus cañones pero solo salió una ráfaga corta porque los mismos se trabaron. Entonces se elevó y arrojó sus bombas en el momento en que iniciaba el salto por encima de la estructura, cruzando desde popa y escapando a la derecha. Detrás suyo el alférez Isaac avanzaba disparando sus ráfagas de metralla e impactando con sus proyectiles de 30mm el casco de la embarcación. Antes de chocar contra él se elevó y también arrojó su carga no sin antes comprobar que la nave parecía hallarse detenida ya que no se veía la típica estela blanca en el agua, detrás.
Cuando los pilotos iniciaban el viraje para efectuar la maniobra de escape, vieron que el barco se hallaba casi cubierto por gruesas columnas de espeso humo. En ese momento se perdieron ambos de vista pero minutos después reestablecieron el contacto mientras volaban con el mismo rumbo y silencio total de radio.
Mientras el portaviones británicos ardía a sus espaldas, los aviadores argentinos se encontraron en el punto establecido con el avión cisterna, el fiel Hércules KC-130, que volaba a 5000 metros de altura, sobre las azules aguas del mar. El tiempo era bueno y la visibilidad también.
Los pilotos tuvieron dificultad para embocar sus lanzas en las canastas de las mangueras debido a la enorme tensión que habían experimentado. Sin embargo, la operación se realizó sin inconvenientes y pudieron continuar.

Aterrizaron en Río Grande sin inconvenientes, primero Ureta y segundos después Isaac. Mucha gente los esperaba, entre ellos, el capitán Francisco y el teniente Collavino. La muerte de Vázquez y Castillo había causado pesar en el ánimo de todos. Los dos pilotos de la Fuerza Aérea se abrazaron y lloraron amargamente mientras sus compañeros de la Armada, que los observaban, sentían la pérdida como propia. Otros dos valientes argentinos habían caído para siempre en la helada inmensidad del Atlántico Sur, demostrando una vez más su coraje y su honor.
El 30 de mayo, el “Invincible” fue atacado con el último Exocet que le quedaba a la Argentina.

Fuente: "Malvinas: Guerra en el Atlántico Sur" (inédito) Alberto N. Manfredi (h)

¡VIVA LA PATRIA!

domingo, 18 de enero de 2009

Dolchstoßlegende (o Dolchstosslegende)

La Dolchstoßlegende (o Dolchstosslegende, en alemán es traducible por "leyenda de la puñalada por la espalda") hace referencia al mito social y a la teoría popular de persecución y propaganda en Alemania durante el periodo de entreguerras (1918-1939). Esta teoría atribuye la derrota de Alemania en la Primera Guerra Mundial a un determinado número de asuntos internos domésticos, en lugar de a una fallida geoestratégica militar. En especial, la teoría subraya que el pueblo alemán no supo responder a la "llamada patriótica" en el momento crucial de la guerra y que algunos habrían "saboteado el esfuerzo bélico" a propósito.
El Dolchstoß se tiene como uno de los factores más importantes para explicar el ascenso al poder de Adolf Hitler más adelante, ya que gran parte de la base política inicial del Partido Nazi la componían veteranos de la Primera Guerra Mundial y muchos de los que eran cercanos a la interpretación Dolchstoß de la historia reciente alemana.



Motivación
1. Perspectivas de la Guerra, el Espíritu de 1914

El inicio de la Primera Guerra Mundial en 1914 parecía que iba a borrar muchas de las diferencias políticas existentes en la sociedad alemana de principios del siglo XX; católicos, judíos, luteranos, socialistas, conservadores y liberales fueron sobrepasados por el fenómeno del Espíritu de 1914. Masas jubilosas se reunían para escuchar las noticias sobre la guerra y una fuerte ola de euforia tuvo lugar en todas las celebraciones públicas. El orgullo nacional había mostrado todo su potencial como fuerza de unión y cohesión; muchos consideraron que estaban en el inicio de una nueva era, basada casi por completo en la infravaloración de los horrores de la guerra y en la fe en una rápida y poco sangrienta victoria.
Muchos tenían la impresión de que la Triple Entente había anunciado la guerra, y desde esa perspectiva la causa alemana en la guerra estaba justificada. La Rusia Imperial era vista como una potencia con ambiciones expansionistas y el resentimiento de Francia contra Alemania por su derrota en la Guerra Franco-Prusiana de 1870 era bien conocido. Después, los alemanes quedaron sorprendidos al conocer que el Reino Unido había entrado en la guerra, y muchos sintieron que su país estaba siendo atacado en grupo; daba la sensación de que el Reino Unido usaba al asunto de la neutralidad belga como excusa para entrar en la guerra y así neutralizar las amenazas alemanas a los intereses comerciales británicos.
Según la guerra parecía no terminar nunca, las ilusiones de una victoria fácil se desvanecieron, y los alemanes comenzaron a sufrir las consecuencias de la que sería una guerra terriblemente costosa. Con la euforia inicial terminada, resurgieron las viejas divisiones. Las sospechas contra los católicos, socialdemócratas, y judíos crecieron a la vez que el entusiasmo inicial decaía. En consecuencia las lealtades nacionales se pusieron en entredicho. Antes de la guerra existía bastante tensión política, especialmente ante la creciente presencia de socialdemócratas en el Reichstag. Esto generaba muchos temores en la aristocracia en el poder y sirvió para que se le negasen a Erich Ludendorff los fondos que reclamaba para el Ejército alemán.

2. Beneficio y desorden civil


Aquellos que se estaban beneficiando de la guerra fueron también objeto de críticas. Krupp mismo fue acusado de fabricar armas para ambos bandos —una práctica extremadamente beneficiosa. Los intereses individuales aumentaron en otros sectores. Mientras los administradores hicieron frente a la economía de tiempos de guerra introduciendo nuevas medidas como los precios máximos fijos y otras, los productores respondieron en muchos casos haciendo nuevos productos y abandonando los "controlados", lo que dio paso a escaseces. Esto llevó a una gran tensión entre las ciudades y el campo y, aún más importante, privaciones exacerbadas y enfrentamientos entre clases. En 1917 las huelgas se habían convertido en algo común a lo largo de Alemania, y los trabajadores industriales que tomaron parte en estos eventos fueron vistos con desdén por parte de la población. Ese año hubo casi quinientas huelgas en el país dando como resultado más de dos millones de días de trabajo perdidos.
El desorden civil creció como resultado de la incapacidad para encontrar acuerdos entre las partes, con o sin la presunta "escasez de patriotismo". Siendo cierto que la producción se desplomó durante los años cruciales de 1917 y 1918, la nación había maximizado su esfuerzo bélico y no podía ir más allá. Los datos de producción en bruto confirman que Alemania posiblemente no habría podido ganar una guerra de desgaste contra Reino Unido, Francia y los Estados Unidos combinados. A pesar de su superioridad individual, el potencial industrial y humano de Alemania eran igualados y superados por la Entente en su conjunto. La retirada de Rusia en 1917 apenas afectó al resultado global, en tanto que los Estados Unidos entraron en la guerra a partir del 16 de abril de 1917. La producción industrial americana sobrepasaba a la alemana por sí sola.

3. Propaganda aliada


En sus memorias, Erich Ludendorff permanentemente señala que el liderazgo Hohenzollern falló a la hora de considerar el poder la propaganda Aliada y de saber manejar la propia. La prensa Británica y Americana tuvo un éxito espectacular con su campaña de folleto y tabloide. El punto de vista en que la autocracia alemana era una exportación del "militarismo Prusiano" y también culpable de crímenes contra la humanidad incluso tuvo efecto sobre la sociedad alemana. Tras la salida de la Rusia Imperial de la guerra, la reivindicación del contraste entre el "mundo libre" que quería la paz contra la "bárbara" autocrática Alemania que se suponía que sólo quería la guerra se convirtió en un tema recurrente.
Pese a que frecuentemente se consideraba a Alemania la agresora y por tanto responsable de la guerra, todas sus propuestas de paz fueron rechazadas. Ludendorff estaba convencido de que la Entente únicamente quería una paz draconiana. Esto no es el mensaje que la mayoría de los alemanes percibían del otro lado de la líneas. Los Catorce puntos del Presidente Wilson eran especialmente populares entre la población alemana. Socialistas y liberales, especialmente los Socialdemócratas que integraban la mayor parte del parlamento, eran conocidos "agitadores" por el cambio social antes de 1914. Cuando los Aliados prometieron la paz y la restauración total, el entusiasmo patriótico comenzó a menguar. De un modo parecido, los aliados de Alemania empezaron a cuestionarse la causa de la guerra al extenderse el conflicto, y encontraron respuestas a sus dudas en la propaganda Aliada.
Cuando se firmó el armisticio en 1918, la profecía de Ludendorff pareció tomar forma en el acto; aunque los combates habían terminado, los británicos mantuvieron su bloqueo sobre el continente europeo todo un año provocando hambrunas y graves malnutriciones. La paz no negociable acordada por los políticos de la República de Weimar en el Tratado de Versalles no fue, ciertamente, lo que los alemanes partidarios de la paz habían esperado.

4. El Tratado de Versalles


Como resultado del Tratado el territorio de Alemania se vio reducido en un tercio, la zona del Rhin se desmilitarizó y tropas Aliadas ocuparon diversas zonas del territorio. También hubo unas tremendas reparaciones de guerra que debían pagarse en un período de setenta años (hasta 1988), aunque terminaron en 1931 pese a las complicadas circunstancias. Quizá el aspecto más importante del Tratado en lo referente a la Dolchstosslegende fue la Claúsula de Culpabilidad de la Guerra, que forzó a Alemania a aceptar completamente ser la única responsable de la guerra. El Tratado fue enormemente impopular en Alemania, en buena medida porque penetraba mucho en la soberanía alemana. La Dolchstosslegende fue la antítesis aceptada contra la Claúsula de Culpabilidad de la Guerra, ya que esta se consideraba completamente contraria a lo que el pueblo consideraba lo real.


5. Reacciones y reflexiones de la Postguerra


Líderes conservadores, nacionalistas y ex-militares comenzaron a criticar tanto la paz como a los políticos de Weimar. Socialistas, comunistas y judíos eran mirados con suspicacia debido a sus supuestas lealtades extra-nacionales. Se rumoreaba que no habían apoyado la guerra y que habían tenido un papel importante en la venta de Alemania a sus enemigos. Estos Criminales de Noviembre, o aquellos que parecían beneficiarse de la nueva República de Weimar, eran vistos como aquellos que habían apuñalado por la espalda el frente interior, ya fuera por medio de críticas al nacionalismo alemán o instigando revueltas y huelgas en las industrias militares más importantes. En esencia la acusación era de haber cometido traición contra la "benévola y correcta" causa común.
Estas teorías ganaron credibilidad al contrastarse con los hechos. Cuando Alemania se rindió en Noviembre de 1918, sus ejércitos continuaban en territorio francés y belga. No sólo el ejército alemán estuvo en territorio enemigo durante toda la guerra en el Frente Occidental, en el Frente Oriental Alemania ya había ganado la guerra a a Rusia, concluyendo en el Tratado de Brest-Litovsk. En el Oeste, Alemania estuvo cerca de ganar la guerra en la Ofensiva de Primavera. Contribuyendo a la Dolchstosslegende, el fracaso de esta ofensiva se explicó acusando de ello a las huelgas en la industria armamentística en momentos críticos de la ofensiva, dejando a los soldados sin el adecuado suministro de material. Se consideró que las huelgas fueron instigadas por elementos traicioneros, siendo los judíos los que recibieron la mayor parte de las acusaciones. Todo esto pasó por alto la posición estratégica de Alemania e ignoró como algunos esfuerzos individulaes en el frente fueron marginados al estar los beligerantes envueltos en un nuevo tipo de guerra. La Economía de guerra había deshumanizado todo el proceso e hizo posible un nuevo tipo de derrota que los alemanes sufrieron al surgir la llamada guerra total.
Sin embargo, este mito social de la traición interna resonó entre la audiencia alemana, y sus acusaciones se codificarían como la base del apoyo social al emergente Partido Nazi, bajo un nacionalismo de base racial. El antisemitismo fue intensificado por la República Soviética de Baviera, un gobierno comunista que gobernó la ciudad de Munich durante dos semanas antes de ser aplastado por las milicias Freikorps. La mayoría de los líderes de la República Soviética de Baviera eran judíos, un hecho que sirvió para que los propagandistas antisemitas hicieran la conexión con la "traición comunista".

Orígenes

En la parte final de la guerra, Alemania estaba siendo gobernada prácticamente como una dictadura militar, con el Alto Mando Supremo o Oberste Heeresleitung (OHL) y el Generalfeldmarschall Paul von Hindenburg como Comandante en Jefe aconsejando al Kaiser Guillermo II de Alemania. Después de que la última ofensiva alemana fracasase en el frente occidental en 1918, el esfuerzo militar alemán se colapsó. Como reacción, el OHL ordenó un veloz cambio de gobierno pasando a uno civil. El General Ludendorff, Comandante Supremo del ejército alemán dijo:
"Le he comunicado a Su Excelencia que ha llegado el momento de colocar en el poder a esos círculos a los que tenemos que agradecer que hayan aguantado tanto. Por ello ahora debemos nombrar a esos caballeros para los puestos de ministros. Ahora podrán hacer la paz que debe hacerse. ¡Pueden comerse la sopa que nos han estado preparando!"
El 11 de noviembre de 1918, los representantes de la recién formada República de Weimar firmaron un armisticio con los Aliados terminando así la Primera Guerra Mundial. El subsiguiente Tratado de Versalles implicó la pérdida de territorios y las reparaciones económicas a los vencedores. Como el Kaiser había sido obligado a renunciar y los militares renunciaron al poder ejecutivo, fue el "gobierno civil" el encargado de buscar la paz - la firma del documento de paz la realizó el Católico Centrista Matthias Erzberger, un civil, que fue posteriormente asesinado por su presunta traición. Esto llevó a la firma del Tratado de Versalles. Aunque públicamente despreciaron el tratado, fue lo más conveniente para los generales alemanes — no hubo tribunales de crímenes de guerra, se les consideraba héroes invictos y podían, secretamente, preparar la caída de la república que ellos habían ayudado a crear.
En 1919 el Ejército Provisional Nacional comenzó a "educar" a un impresionable Adolf Hitler sobre las causas de la guerra y de la derrota, fijando firmemente la Dolchstosslegende en su pensamiento; sería el propio Ludendorff quien lideraría el fracasado Putsch de Múnich el 8 de noviembre de 1923 junto con Hitler; fue el Reichswehr el que proveyó al Partido Nazi de sus primeros afiliados y fue el anciano de 85 años Paul von Hindenburg quien nombraría a Hitler canciller de Alemania el 30 de junio de 1933.
El nacimiento oficial del término posiblemente se puede datar a mediados de 1919, cuando Ludendorff estaba celebrando una comida con el general Británico Sir Neil Malcolm. Malcolm le preguntó a Ludendorff cómo había sido posible que la dura Alemania perdiese la guerra. Ludendorff contestó con la típica lista de excusas: el frente interior falló, etc. Entonces, Sir Neil Malcolm dijo que "eso suena como si les hubiesen dado una puñalada por la espalda, ¿no cree?" La frase le gustó a Ludendorff y él mismo la extendió entre los otros generales alemanes asegurando que esta era la versión oficial, y después se expandió por toda la sociedad alemana. Esta idea fue adoptada por las facciones políticas de derechas y usado como una forma de ataque contra el gobierno socialdemócrata de Weimar, el cual había llegado al poder en la Revolución de Noviembre de 1918.
Richard Steigmann-Gall dijo que la leyenda de la puñalada por la espalda se remonta al sermón predicado el 3 de febrero de 1918 por el Capellán Protestante de la Corte Bruno Doehring, seis meses antes de que la guerra hubiese terminado.[1] El erudito alemán Boris Barth, al contrario que Steigmann-Gall, insinuó que Doehring no usó exactamente ese término, sino que sólo habló de "traición".[2] Barth rastrea el primer uso documentado del término en una reunión de políticos centristas que tuvo lugar el 2 de noviembre de 1918 en Munich Loewenbraeu-Keller, en la que Ernst Müller-Meiningen, un miembro de la coalición Progresista del Reichstag usó el término para exhortar a sus oyentes para que continuasen luchando:
'Mientras el frente se mantenga, nosotros tenemos la obligación de seguir resistiendo en nuestra patria. Nos avergonzaremos delante de nuestros hijos y nietos si atacamos al frente de batalla por la espalda y le damos una puñalada. ("...wenn wir der Front in den Rücken fielen und ihr den Dolchstoß versetzten.")
Barth también demostró que el término se popularizó cuando el periódico patriótico alemán Deutsche Tageszeitung citó el 17 de diciembre de 1918 un artículo del Neue Zürcher Zeitung que resumía dos artículos previos del general Británico Maurice con la frase de que el ejército alemán había sido "apuñalado por la espalda por la población civil" ("von der Zivilbevölkerung von hinten erdolcht."). (Maurice más tarde desmintió haber usado ese término.) De esta manera Barth demostró que el término ya era usado de manera común bastante tiempo antes de la apócrifa conversación entre Ludendorff y Malcolm.
Las acusaciones de que la izquierda había sido cómplice de la derrota alemana señalaron duramente a figuras como Kurt Eisner; un judío alemán nacido en Berlín que vivía en Munich. Este había escrito reiteradamente desde 1916 acerca de la naturaleza ilegal de la guerra y fue una figura importante en la revolución de Munich hasta que fue asesinado en febrero de 1919. La República de Weimar, bajo el gobierno de Friedrich Ebert, no dudó en aplastar violentamente las revueltas de obreros con la ayuda de Gustav Noske y el Reichswehr General Groener, y toleró las paramilitares Freikorps existentes por toda Alemania. A pesar de esta tolerancia, la legitimidad de la República fue atacada constantemente alegando cosas como "la puñalada por la espalda". Muchos de sus representantes, como Matthias Erzberger y Walther Rathenau fueron asesinados, y los líderes fueron tildados de "criminales" y judíos por la prensa de derechas que dominaba Alfred Hugenberg.
El historiador alemán Friedrich Meinecke intentó señalar el origen del término en un artículo del periódico vienés Neue Freie Presse de fecha 11 de junio de 1922. En las elecciones nacionales de 1924 el diario cultural muniqués Süddeutsche Monatshefte publicó una serie de artículos acusando al SPD y a los sindicatos de ser los culpables de la derrota alemana en la guerra (la ilustración que encabeza esta página es la portada de abril de 1924 de este diario, que fue publicada durante el juicio a Hitler y Ludendorff por alta traición). El editor de un periódico del SPD demandó al diario por difamación, dando lugar a lo que se conoce como el Munich Dolchstoßprozess desde el 19 de octubre al 20 de noviembre de 1924. Muchas figuras relevantes testificaron en ese juicio, incluyendo a miembros del comité parlamentario encargado de investigar las causas de la derrota, por lo que algunos de los resultados de dicho comité se hicieron públicos mucho antes de que se publicase el informe oficial del comité en 1928.
El Dolchstoß fue la imagen central que produjeron muchos de los partidos políticos conservadores y derechistas que surgieron en los primeros momentos de la República de Weimar, incluyendo el NSDAP de Hitler. Para el propio Hitler, este modelo explicativo de la Primera Guerra Mundial fue de una importancia personal crucial. Él se enteró de la derrota de Alemania mientras estaba siendo tratado de una ceguera temporal por producida por un ataque con gases en el frente. En Mein Kampf describe una visión que tuvo que fue la que le impulsó a entrar en política. Todo a lo largo de su carrera política atacó sistemáticamente a los "criminales de noviembre" de 1918 quienes habían apuñalado por la espalda al ejército alemán.